Nochebuena para Todos

Nochebuena para Todos

Cada vez falta menos para terminar este año tan particular. Sabemos que llega diciembre y con él las Fiestas. Es un momento donde muchos nos reencontramos con nuestros seres queridos y compartimos una cena, un almuerzo o un abrazo. Una época muy especial para todos, principalmente para el Farmacéutico Claudio Bonel.

Nuestro Colega es uno de los ganadores del Premio a la Solidaridad 2020 por su dedicada labor como coordinador de “Nochebuena para Todos”, un proyecto que crece desde hace 21 años y hoy se encuentra en más de diez provincias de nuestro país.

Si bien hace 10 años que Claudio forma parte de él, siempre le gustó ayudar. Nos contó que usualmente, y hace tiempo, colabora con una gran cantidad de entidades e instituciones de todo tipo, pero que sin dudas “Nochebuena para Todos” le cambió la vida.

Llegó de casualidad, o quizás fue el destino que le puso adelante a una Colega quien le comentó que estaba ayudando en la logística de un proyecto. Éste consistía en el armado de unas cajas navideñas pero a gran escala. Intrigado, Claudio quiso saber más y decidió acercarse para averiguar cómo armar su primera caja. “Ese año hice la caja y fue impactante, es difícil de describir. Yo colaboro con un montón de cosas pero esto de armar, llevar la caja y ver toda esa dinámica, todo ese trabajo, me resultó muy movilizador y más aún cuando conocí a mi familia designada, fue alucinante”.

Claudio nos describió este proyecto como un puente de amor entre dos familias que, en esa nochebuena, se trasforman en una sola y comparten juntos la cena. Una de ellas, la que dona, prepara una caja con aproximadamente 60 alimentos, condimentos, fideos, jugos, yerba y muchos más. También se coloca un mantel, cubiertos, platos, adornos de navidad, un regalo para cada integrante y una carta en la que expresen quienes son y que los llevó a compartir su nochebuena.

Por otro lado, la familia que la recibe, también escribe una carta en agradecimiento y ésta es entregada a quien lleva la caja. “Estas cajas muestran la necesidad que hay de decirle al otro sé que estás ahí y estoy con vos, quiero ayudarte”. Cuando se reparten en los centros es algo muy fuerte”, expresó Claudio. A simple vista parece algo sencillo, armarla y enviarla, pero para que este puente crezca y se sostenga hay un arduo trabajo por detrás.

Todos los años, en el mes de marzo, Claudio se reúne con su equipo para empezar a planificar la “Nochebuena para Todos”. Es difícil imaginar en ese momento como será aquel día, pero saben que para que salga todo bien necesitan tiempo y tienen que esforzarse al máximo.

La primera tarea consiste en solicitarle a los centros que trabajan con personas carenciadas que realicen un relevamiento de las familias. Quiénes son, edades, gustos, pasatiempos y talles. Esto lo hacen hasta el mes de agosto donde comienza la segunda etapa que es organizar toda esa información y armar un listado.

De esta forma, el 25 de octubre se lanza “Nochebuena para Todos” y se abre la convocatoria para aquellos que quieran participar. Con los listados, Claudio y todos los colaboradores comienzan a asignar familias, tarea que en muchas ocasiones realizan hasta el mismo día de entrega de la caja.  A medida que pasan los días, aumenta la ansiedad y el estrés, pero también la emoción. Se organizan los grupos con los coordinadores y se designan tareas para el tan esperado día, el cual será un domingo previo a la nochebuena. También es necesario conseguir el transporte, ya que las cajas se reciben en dos mall de Costa Salguero, pero deben ser enviadas a los centros en distintas partes del país.

Con alegría y emoción, Claudio nos comparte como vive ese día tan especial. “Nos levantamos muy temprano, y nos dirigimos a Costa Salguero para recibir más de 4.000 cajas, siendo alrededor de 800 voluntarios. Hay nervios, pero llegas y ves que es un torbellino de energía y felicidad, así que comenzamos a recibir y a cargar los camiones”, afirmó.

Además, todo el equipo tiene que estar atento a los detalles, según nos relató nuestro Colega, muchas veces hay cajas y cartas que nunca llegan. Es ahí donde el equipo interviene, por un lado, teniendo cajas de emergencia llamadas QF para asegurarse de que ninguna familia se quede sin la suya, y por el otro motivando a quien recibe a hacer su carta, para fomentar el lazo entre ambas partes.

Siendo las diez u once de la noche, los mall de Costa Salguero quedan vacíos: “Cuando termina el evento y subimos la última caja al último camión estallamos de alegría, festejamos y brindamos. Nos quedamos ahí, en ese inmenso lugar vacío de cosas materiales pero lleno de energía y alegría. Es difícil expresar lo que sentimos al hacer Nochebuena, pero les diría que es satisfacción”.

Este proyecto ha crecido tanto que ya hay 40 réplicas en todo el país. Este año, debido a la pandemia mundial los organizadores trataron de acotar el movimiento e instaurar un protocolo, por lo cual las cajas se recibirán un sábado y domingo en dos turnos para evitar el amontonamiento de gente. Además de hacer entrega del equipo necesario para cuidar a todos los colaboradores.  “Estábamos preocupados respecto de cuál iba a ser la respuesta, porque la pandemia no es solo un tema sanitario, sino que es social y económico, pero la verdad que hasta ahora viene saliendo todo muy bien”, expresó Claudio con alegría.

Impresionante el proyecto que llevas adelante con muchísimos colaboradores y voluntarios, te deseamos lo mejor para que este año esa energía y espíritu se mantenga intacto y nuevamente puede haber una nochebuena para todos. Muchas gracias Claudio, nunca te olvides que contás con CAFAR, siempre a tu lado.